 Un santo que auspicio el deporte |
El periodista Albert Christian Sellner propuso en la página principal del diario austríaco “Der Standard” que Don Bosco sea nombrado patrono del fútbol y sugirió que el papa Benedicto XVI sea el promotor de este reconocimiento.
En la edición del fin de semana, 3-4 de julio, Sellner señala que muchos jugadores de fútbol se persignan y rezan al cielo durante las competencias deportivas, pero que les falta un santo patrono oficial en esta profesión.
Es sabido que la FIFA prohibió el uso de símbolos y gestos religiosos, pero la mayoría de los jugadores hace caso omiso de tal prohibición y expresan públicamente su fe religiosa.
Al entrenador del seleccionado argentino, Maradona, por ejemplo, en este mundial de fútbol en Sudáfrica se lo vio persignarse y llevar un rosario en la mano durante el desarrollo de los partidos.
En realidad muchos ámbitos profesionales y sociales tienen un santo protector; San Isidoro de Sevilla es el patrono de Internet, Santa Clara de Asís de la televisión, San José de Copertino de los viajes en el espacio y en algún país, como la Argentina, de los estudiantes en dificultad, el arcángel Gabriel de las telecomunicaciones. También en algunas disciplinas deportivas como San Sebastián para los atletas, pero a los futbolistas les falta su santo protector.
Los seleccionados nacionales podrían hacer referencia a los santos de su propio país como Inglaterra a San Jorge, Francia a Santa Juana de Arco, Italia a San Francisco de Asís, Eslovaquia a San Martín.
¿Y quién puede ser el patrón del fútbol? La respuesta de Sellner es, sin lugar a dudas, Don Bosco, porque las características del fútbol son juventud, amistad, alegría, arte con la pelota y fiesta, características que están presentes en la figura de Don Bosco.
En el artículo Sellner traza un rápido perfil biográfico del santo turinés, recordando rápidamente sus recorridas por la ciudad en busca de los muchachos de la calle y de un lugar apto hospedarlos, y poniendo en evidencia todas sus cualidades lúdicas, artísticas y creativas que lo ayudaban en la misión educativa. “Hasta el final de su vida más de 200 jóvenes habían gozado del beneficio de su amistad”.
La propuesta de Sellner es directa. Así como Juan Pablo II declaró a Don Bosco “Padre y maestro de los jóvenes”, “Benedicto XVI tendría la oportunidad de adquirir méritos en el mundo del fútbol proclamando a Don Bosco patrono del fútbol”.
La propuesta de Sellner hace honor al gran aporte que Don Bosco y sus salesianos dieron al juego y al deporte como lugares de educación y de promoción humana, mostrando más el valor de unidad que el de la competición.+ |
No hay comentarios:
Publicar un comentario