El Hermano Alois regala una Biblia en chino a Benedicto XVI OJO CUENTO CHINO
Audiencia anual al prior de la comunidad de Taizé
CIUDAD DEL VATICANO, martes 27 de abril de 2010 (ZENIT.org).- El prior de la Comunidad de Taizé, el Hermano Alois, fue recibido por Benedicto XVI en el Vaticano el jueves 22 de abril y obsequió al Papa con una Biblia en chino: como ésa, Taizé ha distribuido un millón.
De origen alemán, aunque de nacionalidad francesa, el Hermano Alois pudo conversar en las dos lenguas con el Papa Ratzinger, con quien se reunió tras su elección y ha seguido reuniéndose regularmente desde entonces: cinco veces en cinco años de pontificado.
El Hermano Alois realizó un viaje de tres semanas a China y dio al Papa un ejemplar de la Biblia que Taizé hizo imprimir y distribuir en China: un millón de ejemplares por todo el país.
En su Carta de China, el Hermano Alois explica: “Como signo de amistad y de agradecimiento a los cristianos de China, nuestra Comunidad de Taizé, a través de la Operación Esperanza, ha hecho imprimir en 2009 un millón de biblias y las ha hecho distribuir en todas las regiones del país”.
En el encuentro europeo que reunió a 40.000 jóvenes en Bruselas a finales de 2008, el Hermano Alois había anunciado que, en respuesta a las necesidades de los cristianos de China, la Comunidad de Taizé iba a hacer imprimir en China un millón de Biblias: 200.000 Biblias completas y 800.000 Nuevos Testamentos con los Salmos.
La impresión se realizó en Nanjing y desde allí, los libros fueron enviados por etapas sucesivas por todo el país, a lo largo del año 2009.
En 2009, la Comunidad de Taizé apoyó también el trabajo bíblico de la Iglesia protestante en China. Este apoyo continuará en 2010 y 2011.
En la 25ª Jornada Mundial de la Juventud celebrada en Roma el pasado Domingo de Ramos, el Hermano Alois evocó también el ministerio de Taizé ante los jóvenes y destacó el carisma de la oración.
“Nosotros hacemos todo lo posible para que los jóvenes descubran una relación personal con Dios”, dijo entonces.
También destacó la importancia de suscitar la “co-responsabilidad” de los jóvenes en la “comunión” de la Iglesia.
Y la oración tiene también para Taizé, destaca su prior, una dimensión ecuménica, para dar a los jóvenes cristianos oportunidades para rezar juntos.
En referencia a la “Peregrinación de confianza” sobre la tierra, el prior de Taizé evocó los encuentros de jóvenes en Polonia (en Poznan, en diciembre de 2009), pero también en Filipinas (en Manila, en febrero de 2010), en Vietnam, en Portugal.
También se refirió a los proyectos de Chile (en Santiago del 8 al 12 de diciembre de 2010) y de los Países Bajos (en Rotterdam, del 28 de diciembre de 2010 al 1 de enero de 2011).
Con los encuentros como el del pasado jueves en el Vaticano, el Hermano Alois sigue los pasos del fundador de Taizé, el Hermano Roger, quien también se encontraba cada año con Juan XXIII, Pablo VI y Juan Pablo II.
Desde los primeros meses de su nuevo ministerio, acompañado de otros hermanos, el Hermano Alois también fue a visitar a otros responsables cristianos: al patriarca ecuménico Bartolomé de Constantinopla, a los miembros del Consejo Ecuménico de las Iglesias reunidos en Puerto Alegre (Brasil), al difunto patriarca ortodoxo ruso Alexis II y al arzobispo de Canterbury, el Dr. Rowan Williams.
“Con estas visitas, yo querría mostrar que con mis hermanos buscamos apasionadamente la comunión entre los cristianos”, explicó en este sentido el Hermano Alois.
Y añadió: “En Taizé querríamos contribuir a dar una visibilidad mayor a la comunión que, en Cristo, existe ya entre todos los bautizados”.
[Por Anita S. Bourdin, traducción del francés por Patricia Navas]
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