Resucité, y aun estoy contigo, aleluya; pusiste sobre mí tu mano, aleluya; admirable es tu sabiduría, aleluya, aleluya. - Ps.-Probásteme, oh Señor, y me conociste; Tu has conocido mi muerte y mi resurrección. Gloria al Padre.
La Pascua cristiana ,- Nuestra Pascua es Cristo, inmolado por nosotros, Pascha nostrum immolatus est Christus
Desde que Adán pecó en el Paraiso, él y todos nosotros, sus descendientes, quedamos sometidos a la más vergonzosa esclavitud, porque sacudiendo el yugo de los divinos preceptos, caímos bajo la dura tiranía del pecado y del demonio, de la cual no hubieramos podido librarnos, si el Señor misericordiosamente no se hubiera llegado hasta nuestra cárcel para romper las cadenas de nuestro cautiverio. Dios pasó por entre nosotros, asumió nuestra naturaleza, hizose cordero para ser inmolado; pasó por la muerte para resucitar a una vida inmortal, y llegó hasta el Padre, llevando consigo a la humnidad rescatada con su preciosa Sangre, despues de haber sumergido a Satanás en lo más profundo del infierno, y de haber aniquilado para siempre su poderío.
Según eso, la muerte de Cristo ha sido la ruina para unos y la resurrección de otros; la vida de todos los que en Él han creido y en la Sangre del Cordero han blanqueado sus vestiduras, la perdición de los que no han querido atender a la visita del Señor y han pisoteado la sangre del testamento .
Para Jesucristo la Pascua ha sido ya completa y definitiva; porque al tercer día de su inmolación resultó glorioso, y habiendo pagado una vez el tributo a la muerte, nada le debe ya, sino que para siempre goza de la inmortalidad: Quod enin mortuus est, peccato mortuus est semel ; quod autem vivit Deo. Más aún; porque no solo está ya libre de la muerte, sino que el día de la Ascención consumó su transito, pasando del mundo al Pdre, en cuyo seno goza por los siglos de aquel nombre que , según el Apóstol, está sobre todo nombre, o sea de aquella gloria que ni tiene ni tendrá semejante, y que eternamente causará admiración a todos los que con el tiempo, siguiendo sus huellas, pasen del destierro a la patria.
ORACIÓN
Oh Dios , que en este día, por tu Hijo unigénito, vencedor de la muerte, nos has franqueado de nuevo las puertas de la eternidad : atúdanos a realizar los Santos deseos, que Tú mismo nos inspiras, previniéndonos con tu gracia. Por el mismo Jesucristo N. Señor.
EPÍSTOLA
Hermanos: Purificaos de la antigua levadura, para convertiros en nueva masa, como ácimos que soios. Pues ved que ha sido inmolado Jesucristo, nuestra Pascua . Celebremos, por lo tanto, este convite, no con vieja levadura, ni con levadura de malicia y de corrupción, sino con los ácimos de la sinceridad y de la verdad.
Continuación del Santo Evangelio,
según Sn Marcos ( XVI, 1-7 )
En aquel tiempo: María Magdalena, María la madre de Jacobo, y Salomé, compraron especias aromáticas para ir a ungirle.
16:2 Y muy de mañana, el primer día de la semana, vinieron al sepulcro, ya salido el sol.
16:3 Pero decían entre sí: ¿Quién nos removerá la piedra de la entrada del sepulcro?
16:4 Pero cuando miraron, vieron removida la piedra, que era muy grande.
16:5 Y cuando entraron en el sepulcro, vieron a un joven sentado al lado derecho, cubierto de una larga ropa blanca; y se espantaron.
16:6 Mas él les dijo: No os asustéis; buscáis a Jesús nazareno, el que fue crucificado; ha resucitado, no está aquí; mirad el lugar en donde le pusieron.
16:7 Pero id, decid a sus discípulos, y a Pedro, que él va delante de vosotros a Galilea; allí le vereís como os dijo.
HOMILÍA PASCUAL DE NUESTRO PADRE ENTRE LOS SANTOS SAN JUAN CRISÓSTOMO
Aquél que es devoto y amante de Dios, que disfrute de esta magnifica y brillante fiesta. Aquél que es un siervo agradecido, que entre alegremente en el gozo del Señor. Aquél que está cansado en ayuno que reciba ahora el denario de recompensa. Si a1guien ha trabajado desde la primera hora, que reciba su gratificación correspondiente. Si a1guien ha llegado después de la tercera hora, que participe en la fiesta agradecido. Aquél que llega después de la sexta hora, que no dude: él nada pierde. Si a1guien ha demorado hasta la novena hora, que se aproxime, sin vacilación. Aquél que llega en la undécima hora, que no tema a causa de su demora, porque el Señor es de gracia y de generosidad. El recibe tanto a los últimos como a los primeros. El concede descanso al que viene en la undécima hora, igual como aquél que ha trabajado desde la primera. hora. El tiene misericordia del último, y satisface al primero. A aquél da, y a éste regala. El recibe las obras y acepta la intención. Honra los hechos, y alaba el empeño. Por lo tanto, entrad vosotros todos al gozo de vuestro Señor. Los primeros y los últimos, tomad vuestra recompensa. Ricos y pobres, regocijaos y alegraos juntos. Porque la mesa está llena, deleitaos de ella todos. El ternero está echado entero; que nadie se retire con hambre. Regocijaos todos del banquete de la fe. Disfrutad de todas las riquezas de la bondad. Que nadie se queje de su pobreza, porque el Reino Universal se ha manifestado. Que nadie se lamente a causa de los pecados, porque el perdón ha surgido resplandeciente del Sepulcro. Que nadie tema la muerte, porque la muerte del Salvador nos ha librado. Porque destruyó la muerte cuando ésta se apoderó de El. Aquél que descendió al infierno aniqui1ó al infierno; y lo hizo experimentar la amargura; cuando éste tomó su Cuerpo. Esto predijo Isaías cuando exclamó diciendo: "El hades fue amargado, cuando Te encontró abajo. Ha sido amargado, funestamente, porque ha sido destruido. Ha sido amargado porque ha sido encadenado. Recibió un Cuerpo, y he aquí que era Dios. Tomó la tierra, y encontró Cielo. Tomó lo visible, y fue vencido invisiblemente. ¿Oh muerte dónde está Tu poder? ¿Oh hades dónde está Tu victoria Cristo resucitó, y fuiste aniquilado. Cristo resucitó y fueron arrojados los demonios, Cristo resucitó y los Angeles se regocijaron. Cristo resucitó y reinó la vida. Cristo resucitó, y los sepulcros se vaciaron de los muertos. Porque Cristo habiendo resucitado de entre los muertos, fue el Primogénito de entre los muertos, a El sea la gloria y el poder por los siglos de los siglos. Amén.
No hay comentarios:
Publicar un comentario